Fiesta de más desenfreno en Sitges. Empieza el “Jueves Lardo” con la llegada de Su Majestad Carnestoltes y su discurso-crítica satírica de la vida pública de la población.
Los puntos fuertes del carnaval son las desfiladas o Ruas que se celebran el domingo (Rua de la Disbauxa) y el martes (Rua de l’Extermini) . Por la noche son las de los adultos y por la tarde las infantiles.
Existe una gran rivalidad entre los grupos participantes, especialmente entre los miembros de la Sociedad Recreativa el Retiro y la Sociedad Casino Prado Suburense, ambas sociedades centenarias y con los mismos años en rivalidad. Las Ruas las abre S.M. Carnestoltes y las cierra la Reina del Carnaval, figura elegida entre las aspirantes al título en un acto público.
El miércoles de Ceniza finalizan los actos del Carnaval con el entierro de S.M. El Carnestoltes con una comitiva fúnebre dónde después de la lectura del testamento se incineran los restos de S.M.
Es una fiesta llena de color y sensualidad, reconocida mundialmente y cubierta por gran cantidad de medios de comunicación nacionales e internacionales, con 150.000 espectadores en la rua del domingo por la noche, 20.000 espectadores en la rua infantil del domingo por la tarde y 250.000 espectadores el martes por la noche.
Los participantes en las ruas del domingo y del martes por la noche son unos 2.500 agrupados en 50 carrozas. En las ruas infantiles de la tarde participan alrededor de 1000 niños agrupados en unas 20 carrozas.
Durante esta semana de carnaval se realizan distintos actos en las sociedades del Retiro y del Casino Prado, S.M. El Carnestoltes visita los colegios y distintos lugares públicos de la población durante el día. Las fiestas se cierran con las tradicionales Xatonades, plato típico de la época del Carnaval, cuyo origen se disputan todas las poblaciones vecinas, aunque la población de Sitges explica su origen sitgetano con dos corrientes: la que dice que Santiago Rusiñol al ver la “montañita” de la escarola, anchoas, aceitunas… cubierta de salsa de xató, exclamó “ oh, c’est un chateau!”; y la que dice que los marineros de Sitges cuando volvían a casa provenientes de Isla Cristina (Huelva), era normalmente febrero, época de las escarolas y elaboraban el plato con las anchoas que traían de la pesca.