El Ayuntamiento de Sitges recuerda hacer un uso responsable de los patinetes eléctricos

El uso racional de estos vehículos de movilidad personal siempre es importante, pero aún lo es más en fechas señaladas como Navidad, cuando la afluencia de gente en las calles es mayor.

Conducir con responsabilidad es una obligación para todos los usuarios y usuarias del patinete eléctrico. En fechas señaladas y multitudinarias como Navidad, sin embargo, hacer un uso responsable de este vehículo de movilidad personal resulta aún más crucial. El Ayuntamiento quiere recordar a los conductores del patinete las recomendaciones y obligaciones que afectan a este tipo de vehículo, para garantizar la seguridad tanto de peatones como de usuarios.

Según la normativa vigente del Ayuntamiento de Barcelona y del Àrea Metropolitana de Barcelona, la edad recomendada para poder conducir patinete eléctrico es de dieciséis años. Sitges aún no dispone de normativa municipal sobre los vehículos de movilidad personal, y por este motivo, toma estas dos instituciones y el Reglamento General de Circulación como referentes en el uso de estos vehículos.

Las recomendaciones para llevar patinete eléctrico, aparte de la edad para conducirlo, son las siguientes:• Por la noche es necesario llevar elementos reflectantes y la luz encendida
• En los cruces se debe comprobar que se puede pasar y que nos han visto
• Es recomendable llevar el casco
• Se recomienda la contratación de un seguro de responsabilidad civil

En cuanto a las obligaciones que debe cumplir toda persona usuaria del patinete eléctrico, son las siguientes:
• No se puede llevar acompañante
• No se pueden utilizar auriculares ni móviles
• No se puede superar la tasa de 0.25 mg/l de alcoholemia ni consumir drogas
• No se puede superar los 25 km/h
• No se puede circular por zonas peatonales como las aceras
• Se deben obedecer las señales y normas de tráfico

Por otra parte, la Autoridad Metropolitana del Transporte (ATM) ha prohibido indefinidamente que se pueda llevar el patinete en transporte público. El consorcio considera que no existen garantías de seguridad y que se pueden volver a repetir episodios de explosiones, como la ocurrida en el interior de un vagón de ferrocarriles de la Generalitat el pasado mes de noviembre.