Cuando pensamos en conexiones con Cuba, nuestra mente suele dirigirse a Florida, Nueva York o las islas del Caribe. Sin embargo, sorprendentemente, Sitges comparte una relación íntima y fascinante con la isla tropical caribeña de Cuba que a menudo se pasa por alto.
El vínculo entre Sitges y Cuba se remonta a más de un siglo y ha dejado una huella indeleble en la ciudad. En este artículo, profundizaremos en los antecedentes históricos de los jóvenes que emigraron a Cuba, exploraremos la cautivadora arquitectura y hablaremos del vínculo que existe entre estos dos lugares aparentemente sin relación.
Si estás pensando en pasar tus próximas vacaciones en la isla Caribeña, además de preparar tu visado Cuba y empaparte de lecturas sobre su historia, te recomendamos pasearte por las calles de Sitges para empezar a sentir la esencia de la cultura cubana en nuestra tierra.
¿Tienen algo que ver Cuba y Sitges?
La conexión Cuba-Sitges se remonta a principios del siglo XVIII, cuando un grupo de jóvenes residentes en Sitges emigraron a Cuba en busca de mejores oportunidades. Muchos de ellos encontraron trabajo en la bulliciosa industria minorista de La Habana, donde ganaron buen dinero y adquirieron una valiosa experiencia que trajeron de vuelta a su localidad natal.
Invirtieron en varios negocios e inmuebles, dejando una huella distintiva en la arquitectura de la ciudad. Hoy, los visitantes aún pueden admirar las elegantes mansiones que construyeron estos indianos o « Americanos », nombre dado a los españoles que emigraron a América en el siglo XVIII y en épocas posteriores.
Las casas de los « Americanos », historia viva en Sitges
Muchos de estos indianos construyeron grandes y ornamentadas casas en Sitges con el dinero que ganaban en Cuba. Estos edificios son conocidos por sus intrincados diseños, su impresionante tamaño y sus llamativas características.
Tanta es la relación de Sitges con Cuba que incluso la pequeña villa mediterránea le ha dedicado una de sus calles, así puedes encontrar la calle “Isla de Cuba” en el centro del pueblo que tiene además construcciones de los americanos de gran belleza como la modernista Villa Avelina de Bonaventura Blay, actualmente el Hotel El Xalet.
Existen rutas guiadas de las casas de los “Americanos” que las puedes hacer con Agis, las guías turísticas de Sitges, y te contarán quiénes eran estos Americanos, qué hicieron por Sitges, por qué se fueron, cuando volvieron, cuales eran sus negocios, cómo modernizaron Sitges y también te hablarán de los arquitectos que construyeron sus casas y de las anécdotas más destacadas de sus vidas.
Ejemplos de casas de “Americanos” (como se conocen a los sitgetans que marcharon a hacer fortuna en las Américas) los encontrarás paseando por el centro de Sitges, casas majestuosas que hoy se han reconvertido en hoteles como el Hotel Romàntic, el Hotel Noucentista… y bien merecen una visita.
Otros ejemplos de casas de “indianos” o Americanos, son la Casa de Bartomeu Carbonell con la sorprendente Torre del Reloj en el Cap de la Vila, Villa Havemann que hoy alberga la Fundació Ave Maria, Villa Subur, Villa Remei…
Al lado del Ayuntamiento podemos encontrar el edificio del Mercat Vell, no es una construcción de los Americanos, pero es el edificio que antiguamente albergó el museo de Casa Bacardí (ya no existe), ya que el fundador de esta casa tan internacional de ron cubano (entre otras bebidas del grupo), era sitgetano, Don Facundo Bacardí, que emigró a Cuba dónde fundó una de las destilerías de ron más conocidas del mundo .Cerca del Mercat Vell se encuentran las casas de Aleix Vidal Quadras, de Manuel Jacas y de Manuel Vidal Quadras, y las Cocheras Vidal Quadras (Baluard Vidal y Quadras ), todas ellas construcciones neoclásicas realizadas entre 1852 y 1856.
- Actualmente Casa Bacardí ya no tiene sede en el Mercat Vell.
El cementerio de Sant Sebastià bien merece una visita, está considerado un cementerio de gran belleza por las esculturas y panteones que se hicieron construir algunos “Americanos” como los de Manuel Vidal Quadras (1856), obra de Alejandro Mariotti, el de Antoni Serra Ferret (1901), de Josep Reynés, y el de Jaume Brassó Mainés (1923), del cual destaca la escultura de Pere Jou.
Es fascinante pensar que estos edificios, que se construyeron hace más de un siglo, sigan en pie como testimonio del vínculo cubano-sitgetano.
En cualquier caso, la arquitectura de época de Sitges es una mezcla de diferentes estilos, con algunos edificios diseñados en estilo Art Nouveau americano y otros que toman prestados elementos de las épocas gótica, Art Déco y renacentista.
Hay una verdadera fusión de arquitectura que muestra la riqueza y el éxito de estos « indianos » en su ciudad natal. Por este motivo, pasear por las calles de Sitges es como retroceder en el tiempo mientras exploras los grandiosos y extravagantes edificios que siguen en pie hoy en día.
Dos ciudades históricamente conectadas
A pesar de lo que pueda parecer en un principio, la conexión entre Sitges y Cuba puede resultar sorprendente, pero es innegable. La huella que dejaron en esta pequeña ciudad catalana el dinero y la experiencia que trajeron los emigrantes cubano-sitgetanos es evidente en la ornamentada e inspiradora arquitectura que se conserva hoy en día.
Son estas historias las que hacen que viajar sea tan enriquecedor y cautivador, y visitar Sitges, donde aún prospera el legado de Cuba, es una obligación para cualquier entusiasta de la arquitectura y la historia que pase por el norte del país.