Qué es el proyecto de Vallcarca, de qué se trata y por qué genera enfrentamientos el hub audiovisual en la antigua cementera.
Vallcarca es el emplazamiento dónde desde 1903 se estableció la primera fábrica de cemento de España y que contó con una colonia que llegó a albergar entre los años 50 y 60 a unos 5.500 trabajadores y con un pequeño puerto, hablamos de 49 hectáreas «calificadas como suelo urbano» pero formando parte del Parque de Garraf que es un espacio natural protegido.
Foto de Vallcarca Next. Imagen actual de Vallcarca
La cementera conocida como Cementos Uniland, está en situación de escasa o nula productividad desde finales del 2012, pero ocupa un espacio privilegiado frente al mar y protegida por el Parque Natural del Garraf.
Tenía un antiguo «apeadero» del tren que estuvo en uso hasta 1994 y un pequeño puerto que hoy en día lo usan los chavales para saltar al mar, una playa que es sede del conocido chiringuito Hola Beach Club, conocido por sus fiestas para los más jóvenes que encuentran allí su espacio alejado de la población urbana, además de la conexión a través de la carretera de las Costas de Garraf, a pocos minutos del aeropuerto de Barcelona y a unos 25 minutos de la ciudad condal… todo un caramelito.
Foto de Vallcarca Next. Proyecto modelo de puerto productivo con usos de investigación y formación. Plató acuático.
Sobre la mesa está convertir este espacio en un hub audiovisual, con platós de rodaje terrestres, marítimos, auditorio polivalente al aire libre, espacios de investigación de la industria digital, audiovisual o videojuegos, formación, productoras…. viviendas para trabajadores, servicios de ocio y restauración… prácticamente diríamos que un parque temático del mundo digital y audiovisual, supone la transformación de la antigua fábrica de cemento y de todo el frente marítimo (se recuperaría la playa y se transformaría el puerto, hoy todavía ligado a la actividad cementera) en un nuevo hub tecnológico y audiovisual al sur de Barcelona.
Foto de Vallcarca Next. Proyecto Espacio polivalente para actividades vinculadas al ocio y al entretenimiento gracias a las grandes luces que permite la geometría de la cúpula.
Este proyecto tiene detrás a Carlos Slim, un magnate mexicano que prevé invertir inicialmente sobre los 300 millones de dólares, aunque no es el único que le ha puesto los ojos encima, otras empresas del mundo audiovisual, de las que destaca Virgin, también han mostrado su interés en este enclave privilegiado.
Genera controversia el convertir este espacio natural aparentemente protegido, en un parque tecnológico, además de que la construcción de viviendas daría pie a un posible «pelotazo» inmobiliario.
Foto de Vallcarca Next. Espacios urbanos abiertos.
El arquitecto Jordi Artigas, sitgetà con el estudio OUA de arquitectura en Barcelona, defiende el proyecto argumentando que de las 49 hectáreas calificadas como suelo urbano, sólo se transformarían 16,5 , 20,9 las ceden al Parque de Garraf y las 11,6 restantes las convertirían en zona verde, además de recuperar la antigua riera hasta la playa y la regeneración de su flora y fauna.
Foto de Vallcarca Next. Proyecto recuperación de la riera
Jordi Artigas propuso el proyecto a los propietarios en colaboración con el estudio del arquitecto Josep Mias y afirman que el proyecto puede generar hasta 2000 puestos de trabajo que no tiene sentido que vayan a vivir a otras poblaciones, además de que se ha proyectado como un sistema autosuficiente energéticamente hablando y evita los desplazamientos de mucha gente que si tendría un impacto medioambiental, facilitando que la gente pudiera vivir dónde trabaja y con precios más asequibles que en Sitges ciudad.
Fuente de información: La Vanguardia / Teresa Sesé
¿Cual es la posición del Ayuntamiento de Sitges ante el proyecto de Vallcarca?
Fuente de información: La Vanguardia / Ramon Francàs
Según el periodista Ramon Francàs, los promotores del proyecto se reunieron con el gobierno municipal ayer lunes 24 de julio, pero fue pura «cortesía» ya que ambas partes acordaron seguir dialogando pasado el verano y la alcaldesa Aurora Carbonell mantiene su intención de someter este proyecto a consulta ciudadana.
Los promotores tuvieron una primera toma de contacto con la nueva concejal de Urbanismo y Territorio y de Acción Ambiental y Transición Ecológica, Carme Gassulla (Verds En Comú Podem), y el concejal de Promoción Económica, Comercio y Ocupación, David Martínez (Sitges Grup Independent).
Las posiciones son encontradas, por un lado resulta de especial interés diversificar la economía local tan centrada en el turismo, apostando por la llamada «economía naranja», pero por otro lado está la problemática de la protección de un espacio natural y evitar un posible pelotazo inmobiliario. El proyecto no es sencillo.
Como dice la jefa de la oposición y presidenta del Consell Comarcal del Garraf, Mónica Gallardo “es perfectamente compatible preservar e incluso enaltecer el entorno natural del Parque del Garraf y desarrollar, a la vez, la ciudad tecnológica”.
Les Agulles-Ecologistes en Acció del Baix Llobregat i Garraf ha mostrado su total oposición a este “megacomplejo turístico, con apartamentos, hoteles, zona comercial, equipamientos y un presunto campus tecnológico de alto nivel”. Lo definen como “una “pesadilla de dimensiones faraónicas en tiempos de colapso social y ambiental”.