Hoy hemos leído el comunicado de la Familia Matas-Arnalot sobre el cierre del Café Roy de Sitges y nos ha dejado una gran tristeza.
Os dejamos el comunicado de la Familia Matas-Arnalot:
Estamos desde el año 1956, cuando nuestro padre creó la primera cafetería en nuestra villa con el nombre de Roy. Era heredera del antiguo Cafè Orient, regentado y conocido como Can Rafel del Coro – con el piano de manubrio y el billar – y, después, como casa de la Tía Salvadora. Es donde se prepararon los primeros perritos calientes, bikinis y pollos al ast, dándole un carácter más internacional. Y es que nuestro padre tenía ya una amplia visión del futuro turístico que le esperaba en Sitges.
Roy era un café emblemático y del pueblo, donde se acogían las tertulias de J.V. Foix, de Sempronio, de Miquel Utrillo hijo, la Tertulia Bohemia… Y también fue el primero en tener y ofrecer internet. Es el lugar al que llevaron los Escritores del Mes, patrocinados por el Institut d’Estudis Catalans. Donde se dedicó la primera exposición de homenaje al pintor Josep Miquel Serrano, después de su muerte. Donde también estaban las típicas capillas de la época y la tarima por donde se veía pasar el glamour de todo Sitges en una época goloriosa del turismo local.
Un cúmulo de circunstancias, como las exigencias por parte de la administración derivadas del Plan de Usos, así como problemas técnicos y estructurales, nos han hecho tomar la razonada y sentimental decisión de no continuar con nuestro ilusionante proyecto.
Por tanto, nos vemos en la obligación de comunicarle que el Cafè Roy 1956 cierra las puertas definitivamente. Pero, antes de despedirnos, queremos darles las gracias por todas las atenciones recibidas por vuestra parte, deseando que lo haya disfrutado tanto como nosotros durante estos últimos 66 años.
Bien cordialmente
Familia Matas-Arnalot.»
Una noticia triste, cierra uno de los establecimientos referentes de Sitges y que son parte de nuestra historia y del crecimiento de Sitges como villa turística.
Muchas gracias familia Matas – Arnalot por tan buenos momentos que hemos podido vivir en el Café Roy, dejará un gran vacío en Sitges.
